domingo, 17 de marzo de 2013

Capítulo 29 :)

Hola, sinsajitos divergentes :)

Este capítulo viene cargado de acción, así que disfrutadle ^^



Capítulo 29 - Katniss.

Me encuentro en el comedor en el que he comido hace una hora. Está vacío y silencioso. Doy un paso hacia delante y dos cestas de mimbre aparecen en la mesa que tengo delante.


Una tiene un cuchillo tan grande como mi antebrazo. La otra, un queso.

-Elige.-Se oye la voz de Naty. Me giro hacia los lados pero no está.

-Elige.-Esta vez, hago caso. Miro las cestas detenidamente.

Acabo de comer. El queso no me apetece ahora.

Elijo el cuchillo.

Le cojo delicadamente y las cestas desaparecen. Parpadeo un par de veces para ver que no ha sido fruto de mi imaginación. Me giro y veo que en la puerta hay un perro. Si se puede llamar así. Se parece a uno de los mutos lobunos que hay en algunos Juegos Del Hambre. Me enseña sus mortíferos dientes y yo coloco el cuchillo en posición. El muto corre hacia mí. En el último momento, bajo el cuchillo y espero.

Algo araña mis brazos y veo que el muto me araña cariñosamente. Quiere jugar. En ese momento, una niña rubia con un vestidito blanco aparece en la habitación.

-¡Perrito!-Grita la niña.

El letal animal se da la vuelta, enseña sus dientes a la niña, y antes de que le dé tiempo de correr, me tiro sobre él mientras le propino varias puñaladas. Cuando no se oyen las respiraciones del muto, paro.

Me froto los ojos.

Al destaparlos, veo que estoy en un autobús.

Me agarro a una barra y espero a ver qué sucede. Un hombre delante de mí lee el periódico. En portada, hay un titular: "Mortífero asesino anda suelto." Miro la foto y no sé por qué, pero me suena de algo ese asesino. El hombre que sostiene el periódico, lo baja bruscamente y señala con el dedo al asesino de la portada.

-¿Le conoces?

Me quedo callada. Parece que si le digo la verdad pueda herirme.

-¿Le conoces?-Repite, esta vez más alto.

-No, lo siento.-Digo, con mi habitual cara de indiferencia.

-Sé que mientes. ¡Estas mintiendo! ¡Podrías salvarme!-Grita el hombre.

Cierro los ojos, esperado que todo to hay terminado; así es.



Vuelvo a estar en la habitación de los espejos. Naty me mira, impasible. Aunque una pizca desconcertada.
-Espera aquí un minuto.-Se dirige a la puerta. La oigo susurrar.-No lo entiendo...

Se va.

Me aferro fuertemente a los reposabrazos, en un intento fallido de controlarme. Al rato, Naty aparece de nuevo por la puerta. Viene hacia mí y se pone a mi altura para verle la cara. 

-Katniss....-Ella me mira fijamente. Se acerca a mi oído y me susurra:-Tu prueba ha sido desconcertante. -"¿Eso significa que lo he hecho mal?" Pienso.-Al haber cogido el cuchillo tienes posibilidades de entrar en Intrepidez.-Mi cara se ilumina.-Pero al haber reaccionado con tanta astucia ante el perro, tienes posibilidades para Sabiduría. Al haber mentido al hombre, te descartamos de Sinceridad ya que no has sido sincera; también de Cordialidad, al no haber sido muy alegre con el hombre; y de Abnegación al no haberle ayudado.-Termina.

Estoy confusa. Creí que sólo se podía ser apto para una sola facción. Ahora veo que no.

Naty sigue hablando, ahora en un tono más bajo.

-Katniss... Las personas como tú son especiales, ¿entiendes?-"No." Pienso. Pero aún así asiento.-No hables de esto con nadie. NADIE debe saberlo. Esto te debe quedar claro. ¿Vale? Prométemelo.

-Lo prometo.-Digo. Mi voz tiembla.

-Katniss eres Divergente.

-¿Qué?

-Divergente. Una persona Divergente es alguien apto para dos o más facciones. La Divergencia a veces es peligrosa -mi cara se pone blanca-, por eso no debes hablar de esto con nadie.-Me coge de los dos hombros y me mira.-Con NADIE.

-Comprendo.

-Bien. Hemos terminado. Un placer.

-Igualmente.

Me bajo de la estraña silla y me dirijo hacia la puerta. Al salir, me topo con Gale, que va a entrar.

-¿Que tal la prueba?

-Yo... Esto.... Tengo que...-Una cascada de palabras sin sentido sale de mi boca.

Me alejo rápidamente.

Me pongo a correr y no paro hasta encontrar un cuarto de la limpieza. Me meto dentro y me acurruco en una esquina. Me abrazo las rodillas y tiemblo. Tris no me habló de eso. Divergente. Sólo de pensarlo me recorre un escalofrío. Cierro los ojos pensando que ha sido un sueño. Un mal sueño. Al abrirlos ha pasado bastante tiempo, o al menos eso parece. 

Suspiro.

Debo elegir. ¿Sabiduría u Osadía? 

En sabiduría posiblemente esté mi madre dada su experiencia médica, y eso incluye a Prim, que tendrá que ir con ella.

En osadía estarán Tris y Gale. Mis mejores amigos.

¿Mis familia o mis amigos?

Es confuso.

Muy confuso.

En ese momento se abre la puerta.

Levanto la cabeza y en la oscuridad del cuarto, observo a un chico de aproximadamente 18 años.

-Déjame en paz, Gale.-Digo, casi llorando.

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